octubre 04, 2009

Y de despedida... Welcome to Las Vegas






Y como no podía ser de otra forma, terminamos nuestro viaje en Las Vegas, Sin City, donde las normas se tergiversan, los agentes de la ley hacen la vista gorda y la oferta lúdica se eleva a la enésima potencia...

El desierto de Mohave se sitúa de camino entre LA y Las Vegas. Silencioso, deshabitado, encontramos que la soledad tenía formas de árboles Yoshua. Vimos un correcaminos (mic mic!! qué pequeños son!), una tortuga del desierto y una tormenta de verano. Tras parar en el punto de información de Mohave, dimos gracias por no encontrarnos con más bichos autóctonos. Desde alacranes, pasando por escorpiones, hasta serpientes de cascabel, cobras, coyotes (buscando Correcaminos)... incluso por allí habita el monstruo de Gila!!

Nunca había oído tronar una tormenta en la inmensidad del desierto. Los relámpagos se propagaban y vociferaban como si tuvieran amplificadores.

Y tras la recarga energética de la naturaleza salvaje, descarga de la misma en la salvaje locura de Las Vegas. Casinos inmensos en hoteles gigantescos regentan la ciudad, donde los centros comerciales son los reyes.

Uno puede respirar los cientos de millones de dólares invertidos en la ciudad del neón, mientras cohabita con seres de todas las partes del país (y del planeta), ávidos de deseo por encontrar un trocito de algo perdido.

Nos gustaron Las Vegas, sobre todo, el precio de las noches de hotel ($25 dolores los dos en una king size no está nada mal!), sus máquinas tragaperras, fieles a las películas de toda la vida, sus mesas de póker " las apuestas comienzan en $4.000", la decoración de todos y cada uno de los casinos...

octubre 02, 2009

Los Angeles, California






Hollywood, Muholland Drive, downtown, chinatown, Observatorium, partido de los Dodgers en el impresionante campo de baseball, concierto de música clásica en el Hollywood Bowl, paseo de la fama, Beverly Hills, Bel Air, UCLA, Santa Mónica, Malibú... la verdad es que no podemos decir que no tuvieramos una visión general de la enorme urbe! Todo ello aderezado con otro incendio de fondo, a menos de 20 km del centro de LA. Por lo visto, durante el verano, es normal encontrarse el coche cubierto de ceniza.

LA es una mezcla de culturas sin que ninguna de ellas predomine sobre las demás. Comimos en un indio, un mexicano, un alemán, en un chino... y no en más sitios porque no tuvimos horas para hacerlo! A los dos días de estar en LA, el desierto de Mohave y Las Vegas aguardaban nuestra visita!!!!!!!!!

Tercera parte: Descenso a Los Angeles por la Hwy 1






El sábado comenzamos el descenso desde SF a Los Angeles (LA), bordeando la costa californiana. Paramos en Monterrey, donde comimos el pan relleno de crema de marisco y verduras (típico de la zona) y vimos una exposición de coches antiguos (y algunos tuneados), Santa Barbara, Big Sur, Solvang. Como el camino era largo y hermoso, hicimos noche en la mágica Cambria, ciudad de los artistas. Nos quedamos en un albergue muy auténtico y el domingo llegamos a LA.

Durante el viaje, pudimos disfrutar de la naturaleza americana: elefantes marinos en la costa, halcones y enormes pájaros en Big Sur y también la brutalidad humana: fuimos testigos de un accidente de tráfico bastante impresionante, aunque, afortunadamente, sin heridos graves.